No se deje hundir por la violencia doméstica


La dimensión de la violencia doméstica puede afectar a uno o todos los miembros del hogar. Todos podemos ser víctimas de la violencia doméstica, hombres o mujeres, sin importar su preferencia sexual, también los niños. Además de la conocida violencia entre los miembros de la pareja, puede existir violencia entre el resto de lo miembro de la familia, como de hermano a hermano, hijo a padre y de padre a hijo. En esta ocasión se tratara principalmente el tema de la contra la mujer, para la cual se utilizara indistintamente el termino violencia domestica o violencia contra la mujer.

La violencia contra la mujer es un sistema de intimidación, coacción de conducta que se usa para ejercer control contra la mujer, y puede incluir maltrato, ya sea verbal, físico, sexual, económico y psicológico. La suma de todas las formas de violencias mencionadas y el hecho de proferir amenaza de actos futuros configuran la dictadura y el control ejercidos sobre la mujer.

Este mal afecta a personas que están casadas, divorciadas, que conviven sin estar casadas, que tienen una relación romántica pero no conviven, que mantienen una relación homosexual, y a personas de todos los grupos sociales, económicos, raciales, religiosos y étnicos.

Cualquier persona puede ser víctima de la violencia doméstica, pero la gran mayoría de las víctimas son mujeres.

La situación de sometimiento bajo la violencia suele aumentar en frecuencia y severidad con el paso del tiempo. Personas que ejercen cualquier tipo de trabajo, manual o intelectual pueden ser víctima de abuso.

De acuerdo a los resultados volcados en la 9na Conferencia Mundial sobre Prevención de Lesiones y Promoción de la Seguridad, relacionada con el tema y fueron presentados por el experto Dr. Concha-Eastman quien es el Asesor Regional de la Organización Panamericana de la Salud “OPS”. "La violencia contra las mujeres es reconocida como una violación a los derechos humanos y es un importante problema de salud pública". Eastman añadió: “La violencia contra la mujer tiene un fuerte impacto en el hogar, particularmente sobre los hijos e hijas que también la sufren“.

Es difícil conocer con exactitud la incidencia de la violencia doméstica, ya que frecuentemente las mujeres no la denuncian. No existe una víctima típica. Ocurre entre personas de todas las edades. La violencia domestica no discrimina.


Es difícil reconocer con exactitud la incidencia de la violencia domestica, ya que frecuentemente las mujeres no la denuncian. La violencia domestica no discrimina.

Círculo de la violencia:

Fase (I): Esta es la fase en donde hay tensión, en la gran mayoría de los casos sin motivo. La tensión va aumentando hasta llegar al punto de la violencia. A veces el agresor ingiere bebida alcohólica para tener la excusa para abusar.

Fase (II): Es la fase de la agresión. La víctima puede tener lesiones físicas que, sumadas a las emocionales, al dolor y al terror, puede causar en ella una situación traumática severa.

Fase (III) Es la fase del arrepentimiento. Ha disminuido la tensión para ambos y el abusador actúa mostrando arrepentimiento y afecto. Si la víctima perdona al abusador y cree en sus promesas, sigue un período de calma, también conocido como periodo de la Luna de Miel, pero a medida que pasa un tiempo el círculo retorna a la primera fase.

De acuerdo a dos fuentes consultadas, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos y los Institutos Nacionales de la Salud, “Las mujeres que son víctimas de malos tratos pueden desarrollar alteraciones del sueño, disfunción sexual, depresión, ansiedad, estrés postraumático, trastornos de la conducta alimentaria y desnutrición, y a veces intentan suicidarse“.

La violencia doméstica es un crimen. Si usted está en peligro inminente, llama a la policía, Si teme hacerlo porque es inmigrante indocumentada no se preocupe, la ley le protege.
La policía le informara sobre la protección a la que tiene derecho, las órdenes restricción y le deberá notificar sobre los albergues de violencia doméstica existentes.

Las llamadas telefónicas a los programas contra violencia Doméstica son confidenciales.



Luis Rodríguez, trabaja en Prevención de VIH y el sida para el Spanish Community Center-Shore AHEC en Atlantic City, New Jersey



Publicado en el periódico: "Nuestra Comunidad del Sur de New Jersey" el Viernes 25 de Abril 2008

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